Desguaces Sevilla ¿Sabes cómo funcionan estos centros?

Un desguace no es una chatarrería, los tiempos han cambiado y estos establecimientos se han adaptado a ellos y a la estricta normativa en materia medioambiental y de seguridad. Por eso, acudir a desguaces sevilla para adquirir piezas en buen estado o para deshacernos del viejo coche es una decisión más que acertada.

¿Te has preguntado en algún momento cómo funciona un desguace? Es sencillo y muy complejo a la vez. Todo comienza por la retirada del coche, si eres tú quien lo da de baja, será necesario que vaya una grúa a por él, si no, hay desguaces en los que puedes dejar el vehículo y ellos se encargan del resto.

Una vez que se ha tramitado la baja, el vehículo pasa a un lugar en el que retirarán todos aquellos componentes que puedan resultar contaminantes: aceite, líquido refrigerante, líquido de frenos, etc. Todo ello se recoge adecuadamente para enviarlo a una planta de tratamiento especializada.

Tras este proceso, se extraen todas aquellas piezas que puedan tener valor y que están en buenas condiciones: motores, amortiguadores, volantes, lunas, espejos, etc. Se someten a un proceso de revisión y limpieza, se catalogan y se almacenan para facilitar su localización y posterior venta.

Lo que queda del vehículo pasa a una campa donde permanecerá expuesto. Siempre queda algo que a alguna persona le pueda resultar de utilidad. Cuando ya no hay nada que pueda servir, los vehículos pasan a otro apartado donde una potente prensa los reducirá a pequeños paquetes que irán a una empresa especializada en su reciclado.

Un proceso estrictamente regulado para evitar cualquier tipo de contaminación y perfectamente organizado en cada uno de sus pasos para poder satisfacer las demandas de los clientes de los desguaces, que cada vez son más numerosos.